Caballo entero, PRE, de 6 años.
Hace un año tuvo una fisura en el tejuelo de la EAI. Fue diagnosticado y tratado convenientemente por otro veterinario con reposo, antiinflamatorios y herraje correctivo.
Después de un año de reposo comienza a trabajar y se observa que el caballo cojea de esa extremidad. Tras varios herrajes correctivos, a cuenta del propietario, decide contactar conmigo para resolver la cojera.
EXPLORACIÓN
En la observación directa del caballo y sus aplomos encuentro que está herrado con una herradura elevada en talones por medio de una pletina soldada en los mismos. La vista lateral de ambas extremidades muestra la presencia de un eje podofalángico roto (después de retirar las herraduras) . Además, en el casco de la EAI por su cara medial, se observa una deformación del casco desde la corona que comprime los talones. Por otro lado, ambas palmas son planas, dando lugar a lo que se conoce coloquialmente como caballo palmitieso.
En la exploración física encuentro dolor y sensibilidad a la palpación del TFDS y LS de ambas extremidades, calor en la región de ambos talones delanteros y pulso venoso digital en la EAI. No presenta sensibilidad a la pinza de cascos.
En la articulación interfalángica distal se palpa gran cantidad de líquido que deforma la corona.
EXAMEN EN MOVIMIENTO
Se realiza el examen en suelo blando en círculos y en suelo duro en línea recta observándose una cojera de 3/5 de la EAI, en suelo blando, más acentuada a mano derecha; y de 2/5 en línea recta.
El test de flexión para las falanges de la EAI sale positivo.
Se realiza un bloqueo digital palmar bajo en la EAI y a los 5 minutos se vuelve a trotar en círculo en suelo blando obteniéndose un resultado 100% positivo.
CONCLUSIONES DEL EXAMEN INICIAL
La sensibilidad y dolor a la palpación del los TFDS y LS de ambas extremidades anteriores posiblemente sea consecuencia de la elevación de los talones, que hace descender el menudillo y como resultado se relaja el TFDP y se tensan el TFDS y LS. Se recomienda retirar las herraduras hasta hacer una evaluación correcta del problema y hacer un chequeo ecográfico de los tendones.
El calor en la zona de los talones puede ser debido a la conformación del eje podofalángico que hace aumentar la presión en dicha zona. Se recomienda poner una taloneta compensada para intentar corregir el eje.
La cojera tan marcada, el bloqueo y los antecedentes de fisura hacen necesario la realización de un estudio radiológico de la EAI.
En la proyección DPxPDO se observa una imagen compatible con fractura articular antigua (flechas negras) con resolución incorrecta de la misma dando lugar a un defecto en la articulación interfalángica distal (flecha roja).
En la proyección DP se observa un colapso de la articulación interfalángica distal en su lado medial, así como una remodelación del tejuelo en su cara lateral consecuencia de la fractura.
El examen ecográfico de los tendones no reveló ningún hallazgo significativo, pero se confirmó el diagnóstico de la sensibilidad de los tendones al retirar las herraduras y observar mejoría.
TRATAMIENTO
Infiltración de la articulación interfalángica distal con corticoides y ácido hialurónico.
Herraje ortopédico para corregir la desviación del eje podofalángico y el colapso de la articulación interfalángica distal. Para ello se emplea una herradura de barra medial estrecha y barra lateral ancha y taloneta compensada.
EVOLUCIÓN Y PRONÓSTICO
La respuesta al tratamiento ha sido favorable y después de estar una semana de reposo y otra de paseos a la mano, la recuperación ha sido total. La cojera ha desaparecido, pero no así el problema que la originó, por tanto cabe esperar que vuelva a recaer y haya que realizar otras infiltraciones.